Bouchard, D. (2015), “Brain readiness and the nature of language”, Front. (2011) Monfort y cols. Por el contrario, en niños con capacidad normal o incluso superior puede haber una afectación específica en el desarrollo de sus FE. Recientemente, se ha descripto una familia con epilepsia caracterizada por crisis epilépticas focales y generalizadas asociadas a alteraciones EEG multifocales y generalizadas y disfasia del desarrollo. Ha ejercido la crueldad física contra animales. Hipoacusia y trastornos del desarrollo del lenguaje Se ha constatado que existe un cierto porcentaje de niños con IC que no parece beneficiarse de ese dispositivo y persisten con problemas lingüísticos no esperados. Además, toda prueba que pretenda evaluar FE debería incluir un componente novedoso; esto implica que la tarea no debe resolverse de manera automática (si no, estaríamos evaluando aprendizaje/memoria), sino que tiene que obligar al niño a desplegar alguna nueva estrategia o esquema de pensamiento y a monitorear su desempeño de manera constante. Permite al individuo resolver las dificultades genuinas que enfrenta e implica también el potencial para encontrar o crear problemas, con lo cual se establecen las bases para la adquisición de nuevo conocimiento. Esa asimetría en la estimulación intelectual en vacaciones puede dar cuenta de la diferencia de CI en las distintas clases sociales al final de la escolaridad secundaria. Brió, M. (2007), “Trastorno por déficit atencional: abordaje farmacológico”, en C. Brió (ed. Sparrow, S.; Balla, D. y Cicchetti, D. (2005), Vineland-II Adaptive Behavior Scales, Crowley (Texas), AGS. Bibliografía APA (American Psychiatric Association) (1987), Diagnostic and statistical manual of mental disorders [3ª ed. Evaluación de la comprensión lectora, Madrid, TEA. Incluso puede haber cierta pérdida de CI durante las vacaciones, a menos que estén en ambientes enriquecidos. Otras moléculas pueden ser detectadas, pero requieren resonadores más potentes que los que son de uso clínico habitual. Arévalo, A. y Abusamra, V. (2016), “Neuromitos”, en A. Ferreres y V. Abusamra (eds. Fodor, J. Adol. Hay otras versiones abreviadas, que se pueden realizar por prorrateo de las versiones completas o agrupadas en tests específicos, que permiten dar un índice estimativo rápido en situaciones en que no puede tomarse la escala completa, como sucede en poblaciones especiales (Minshew y cols., 2005). e) Efecto Flynn. 1-6. Los trabajos de Lovaas y colaboradores han demostrado que el aprendizaje es efectivo en al menos la mitad de los niños para la organización de la conducta y de la atención, la comprensión de consignas simples, la consistencia en lo aprendido y el control de conductas inapropiadas (Lovaas, 2000). Además, el nivel y desempeño escolar actual y previo, el desempeño por áreas académicas y sociales. Rash, J.; Kamasawa, N.; Vanderpool, K.; Yasumura, T.; O’Brien, J.; Nannapaneni, S. y cols. No obstante, si bien es una opción válida, no necesariamente tiene que ser la primera elección para la habilitación lingüística de un niño hipoacúsico. (2010) acerca de lograr los acercamientos entre dominios simbólicos y no simbólicos de manera fluida y recíproca. Uso de drogas psicoactivas durante el embarazo. En tres de cada cuatro adultos de más de 65 años, hay depósito de proteínas, de amiloide- (A- ) extracelular, y placas hiperfosforiladas Tau intracelulares dentro de ovillos neurofibrilares (NFT, por su sigla en inglés), con alteraciones en la endocitosis y atrofia cerebral. 155-184. López, M.; Arán Filippetti, V. y Cremonte, M. (2015), “Consumo de alcohol antes y durante la gestación en Argentina: prevalencia y factores de riesgo”, Rev. Juárez Sánchez, A. y Monfort, M. (2001), Estimulación del lenguaje oral, Madrid, Entha. El cableado básico del sistema nervioso central está genéticamente preprogramado. (2009), “Intelligence and neural efficiency: measures of brain activity versus measures of functional connectivity in the brain”, Intelligence, 37(2), pp. St. Clair, M.; Pickles, A.; Durkin, K. y Conti-Ramsden, G. (2011), “A longitudinal study of behavioral, emotional and social difficulties in individuals with a history of specific language impairment (SLI)”, Journal of Communication Disorders, 44(2): 186-199. TEA con discapacidad intelectual y lenguaje normal 3. 3) Observación de la conducta: consiste en determinar la conducta del niño durante la evaluación, así como en situaciones de su entorno natural, la escuela o aquellas donde exista la dificultad, como se describe en el capítulo 19 sobre conducta. Cuadro 5.1 Errores congénitos del metabolismo y afectación cognitiva Enfermedades Signos y síntomas comunes Metabolismo intermedio _____________ Fenilcetonuria Neurológicos: epilepsia, microcefalia, síntomas motores y extrapiramidales, ataxia Homocistinuria Acidemias orgánicas Cognitivos: trastornos del aprendizaje, DI, regresión intelectual y en aprendizaje, ADHD Ciclo de la urea Enfermedades de depósito ______________ Enfermedad de Wilson Neurológicos: epilepsia, microcefalia, síntomas motores y extrapiramidales, ataxia Enfermedad de Niemann-Pick C Cognitivos: DI, deterioro progresivo lento intelectual y en aprendizaje, trastornos de aprendizaje, TEA, ADHD Fenotipo clínico marcador de etiología Fenotipo cognitivo y conductual en casos no tratados (frecuencia en %) Orina con olor a ratón TEA: 5% DI: 90% Cataratas Hábito marfanoide 51% Psiquiatricos: alucinaciones visuales, TOC, esquizofrenia/psicosis Retraso en el crecimiento, anorexia, osteoporosis, enfermedad renal crónica TEA, TOC, alucinaciones visuales Dolor abdominal vómitos Alucinaciones recurrentes Trastornos del ánimo 9% Catatonia 22% Oftalmológicos: anillo de Kayser Flescher (Micheli, 2006) 2/3: inicio psiquiátrico Esquizofrenia; alucinaciones Trastornos del ánimo Irritabilidad, agresividad y desinhibición progresiva (Bonnot y cols., 2015) Déficit en las funciones ejecutivas Parálisis de la mirada vertical 100% Alucinaciones Disfagia Esplenomegalia 90% Disfunción ejecutiva, desinhibición 1/3 Brotes psicóticos Esquizofrenia Porfiria Dolor abdominal Déficit eritropoyético Alucinaciones, esquizofrenia Trastornos del ánimo Catatonia Xantomatosis cerebrotendinosa Polineuropatía-diarrea crónica Xantomas cutáneos Catarata juvenil Trastornos del ánimo Esquizofrenia, Psicosis Mucopolisacaridosis tipo III (síndrome de Sanfilippo) Hernia inguinal, diarrea crónica Otitis media crónica Cardiopatía Escoliosis Facies tosca sutil Hirsutismo Trastornos de lenguaje ADHD refractario al tratamiento Ansiedad, autismo Irritabilidad, conductas agresivas Deterioro intelectual tardío (Wijburg y cols., 2013) Adrenoleucodistrofia Paraplejia espástica 40% T ánimo: manía o depresión 90% Gangliosidosis GM2 Ataxia Distonía Inicio con brote psicótico 40% Abreviaturas: TEA: trastorno en el espectro autista; DI: discapacidad intelectual; TOC: trastorno obsesivo compulsivo; T: trastorno; ADHD: trastorno por déficit de atención con hiperactividad e impulsividad. Quizás si fuéramos más estrictos, la frecuencia de comorbilidades resultaría superior a lo registrado. Greenham, M.; Spencer-Smith, M.; Anderson, P.; Coleman, L. y Anderson, V. (2010), “Social functioning in children with brain insult”, Front. Cortese, S.; Brown, T.; Corkum, P.; Gruber, R.; O’Brien, L.; Stein, M. y cols. Disord., 30(2): 221-228. Immun., 25(8): 1582-1591. Se desconoce la fisiopatología de la mayor parte de los trastornos, pero un grupo considerable obedece a diversas alteraciones de la migración neuronal; entre ellos, la lisencefalia, la polimicrogiria, la displasia cortical focal y la heterotopía nodular periventricular (Guerrini y Dobyns, 2014) que se detalla en los capítulos de etiología. (2015), “Association between breastfeeding and intelligence, educational attainment, and income at 30 years of age: a prospective birth cohort study from Brazil”, Lancet Glob. No hay bibliografía científica que justifique la quelación en niños con TEA. El trabajo parte del conocimiento de las propias fortalezas y debilidades, de las características de la tarea, del conocimiento del propio funcionamiento cognitivo y la generación de imágenes mentales y/o de una descripción mental del recorrido que se va a seguir. Psych. El inicio de los tics debe ser antes de la edad de 18 años. La red de orientación es de naturaleza selectiva y dirige los cambios en la atención espacial. Analítico-sintética: se parte de los fonemas para formar las palabras que van a ser leídas; y se dividen las palabras en sílabas y letras para deletrearlas y escribirlas. Med. La Cochrane Database of Systematic Review (Spittle, 2012) que determina sobre aquellos modelos de intervención temprana con efectividad clínica en niños de alto riesgo y prematuros ha demostrado que se pueden realizar en centros, en domicilio, por profesionales o combinando la enseñanza por parte del profesional y la aplicación por parte de los padres. La distribución por sexo es equitativa durante la niñez y en la adolescencia el sexo femenino presenta el doble de casos. El allocórtex incluye el arquicórtex (corteza entorrinal, retroesplenial, subículo e hipocampo) y el paleocórtex (corteza piriforme olfatoria). Muchas veces, luego de todas estas explicaciones y sin otra intervención que la educación de la familia, constatamos la mejoría del niño en la siguiente visita. 0000132148 00000 n
Uno se ha denominado “subléxico”, “indirecto” o “fonológico”, ya que convierte las palabras escritas en sonidos mediante las reglas de conversión grafema-fonema, procede en serie y es absolutamente necesario en la lectura de pseudopalabras, como “ipitanami”, ya que no tienen representación en el léxico mental. A comprehensive textbook [2ª ed.] Los momentos de demanda del ambiente ligados a la cultura (v.gr., la entrada al preescolar o al secundario) pueden ampliar el retraso en el desarrollo o la deficiencia significativa de un niño con respecto a los otros en lo concerniente a las FE. En función de ello pueden ser abiertos o cerrar el ingreso a nuevos integrantes una vez iniciados. a. Con frecuencia el individuo falla en prestar la debida atención a detalles o por descuido comete errores en las tareas escolares, en el trabajo o durante otras actividades (por ejemplo, pasa por alto o pierde detalles, no lleva a cabo el trabajo con precisión). MacAllister, W. y Schaffer, S. (2007), “Neuropsychological deficit in childhood epilepsy syndromes”, Neuropsychology Review, 17(4): 227244. Intereses restringidos y absorbentes; como mínimo una de las características siguientes: • exclusión de otras actividades; • adherencia repetitiva; • ejecución mecánica más que por significado. Por otra parte, existen características clínicas que son comunes a todas las formas de TND. Achenbach, T. y Rescorla, L. (2001), ASEBA school-age forms & profiles, Washington, ASEBA. Estas dislexias deben reconocerse como tales por medio de las evaluaciones lingüísticas y las pruebas de Boder (1971), pues como presentan un test de Bender normal pueden interpretarse erróneamente como de origen emocional. El segundo sistema, responsable de la “atención voluntaria”, es guiado por la interpretación cognitiva que realiza el sujeto acerca de los estímulos y de la situación y su intención respecto a ella (Luria, 1980). Dis. La mayoría de los niños con ADD son capaces de mantener la atención en ciertas tares y cuando el interés y la recompensa son altos, mientras que otros no pueden lograrlo debido a fallas en la inhibición. Por ende, la evaluación también será necesariamente compleja. Estos dos últimos componentes, si bien también son comunes a las lenguas orales, aparecen con mucha mayor frecuencia en las lenguas signadas. Queda como término de uso habitual en la profesión médica, educativa y otras, así como en la legislación pública y grupos de influencia (APA, 2014). – Parkinsonismo. La reactivación del germen durante la infancia puede producir panencefalitis subaguda con deterioro neurológico progresivo, como las familias herpes zóster y el virus de la rubeola. Sus principales exponentes en los primeros años, según recopila Sattler (2010), fueron: Galton y Pearson, del University College de Londres, en la segunda parte del siglo XIX, se interesaron en el análisis estadístico para cuantificar los procesos mentales. Predictores de la lectura La conciencia fonológica, la denominación rápida y automática (RAN, rapid automatized naming) y el conocimiento de las letras son considerados los principales predictores de la lectura (Norton y Wolf, 2012). 744-750. Por ejemplo, en población con trisomía 21 o síndrome de Down, el gen APP, precursor de proteína amiloide, sobreexpresado por el cromosoma extra, produce un desequilibrio que lleva a la degeneración de las neuronas basales del tronco cerebral, inhibe la recaptación de neurotransmisores en la sinapsis y altera los mecanismos de eliminación de tóxicos por fibroblastos. Krupp, L.; Tardieu, M.; Amato, M.; Banwell, B.; Chitnis, T.; Dale, R. y cols., para el International Pediatric Multiple Sclerosis Study Group (2013), “International Pediatric Multiple Sclerosis Study Group criteria for pediatric multiple sclerosis and immune-mediated central nervous system demyelinating disorders: revisions to the 2007 definitions”, Mult. Dado que tanto las denominadas “encefalopatías inmunomediadas” como las epilepsias autoinmunes en niños son potencialmente tratables con terapia inmune, es importante su reconocimiento temprano. Moret, A. y Mazeau, M. (2013), Le syndrome dys-exécutif chez l’enfant et l’adolescent, París, Elsevier-Masson. La agresividad e impulsividad presentes en estos cuadros generan la necesidad de la intervención farmacológica temprana, casi al mismo tiempo que el tratamiento psicoterapéutico. Cattel, en Estados Unidos, y Kraepelin, en Alemania, crearon las primeras pruebas para procesos mentales y luego, Stern, el concepto de “cociente mental”. Afecta a 1 cada 3500-6000 recién nacidos vivos varones (Bushby y cols., 2010). DSM-5, Buenos Aires, Editorial Médica Panamericana. En el cuadro 8.1 se incluyen los criterios diagnósticos de la quinta edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5) sobre el trastorno del desarrollo de la coordinación motora. Las podemos dividir en su mayoría en dos subtipos: las dificultades vinculadas al procesamiento verbal y las dificultades de aprendizaje no verbales. Birmaher, B.; Brent, D. y The AACAP Work Group on Quality Issues (2007), “Practice parameter for the assessment and treatment of children and adolescents with depressive disorders”, JAACAP, 46(11): 15031526. También debe tenerse presente que todas las flechas que aparecen en el modelo indican que los dominios no serían finalmente tan independientes entre sí. (2004) Wilkinson y Robertson (2006) Cuadro 11.2 Programas de intervención centrados en evidencias científicas Objetivos de la intervención Programas centrados en la evidencia Dificultades específicas de la lectura Conciencia fonémica Enseñanza de la reglas de correspondencia fonema-grafema y viceversa Vocabulario visual Fluidez lectora FONODIS Ayudando a Futuros Lectores JEL-K y JEL Propuesta Dale! En esta última región se encuentran indicios de muerte celular programada (Budday y cols., 2015). CAPÍTULO 13 ATENCIÓN Marina Drake El constante bombardeo de información sensorial a la que el ser humano se halla sometido excede su capacidad para procesarla toda en un mismo momento, por lo que se requiere de un sistema que privilegie el procesamiento de algunos de los estímulos e inhiba otros. Tal vez la forma clínica que Rourke (1993) asocia al trastorno del desarrollo no verbal o las discalculias observadas en el síndrome de Gerstmann del desarrollo (Dansilio, 2008b) correspondan (al menos parcialmente) a este género de presentaciones que considera Geary. En pequeños grupos se trabajan contenidos educativos y terapéuticos grupales e individuales con terapias de apoyo individual, con diversos profesionales que comparten un plan de objetivos. Sin embargo, un estudio local con seguimiento a seis años de niños irradiados por leucemia linfoblástica aguda no mostró diferencias significativas en la evolución en el CI ni en el aprendizaje (Faberman y Tassara, 2013). (2001), “ADHD comorbidity findings from the MTA study: comparing comorbid subgroups”, J. El abuso de alcohol, la depresión y el TOC son comorbilidades frecuentes en adolescentes con fobia social. 500 [N/C] Los trastornos fonológicos o los del tipo léxico-semántico serán los que hagan incluir al niño en una u otra categoría (véase el cuadro 9.4). CAPÍTULO 2 EVALUACIÓN NEUROPSICOLÓGICA E INFORME EN NIÑOS Nora Grañana Cuando una familia consulta para realizar una evaluación neuropsicológica es porque hay preocupación respecto del funcionamiento del niño en un determinado ambiente o situación. Res., 40(1): 18-32. La presencia de alteraciones EEG, en particular espigas centrotemporales o rolándicas en niños con ADHD, es más frecuente que en la población normal (Holtmann y cols., 2003). Factores escolares Aquellos niños que han abandonado la escolaridad pueden tener hasta treinta puntos menos de CI. En resumen, hay que admitir que no existe un método único de identificación de los trastornos del lenguaje. Sinclair, M. y Taylor, E. (2008), “The neuropsychology of attention development”, en J. Reed y R. Warner (eds. Psicosis alternativa y normalización forzada En algunos pacientes los períodos de control de las crisis y normalización o mejoría significativa del EEG pueden asociarse con el desarrollo de una psicosis, manifestaciones que pueden regresar una vez que reaparecen las crisis. Las formas graves, con ECG menor de 8, desarrollan coma, requieren internación en unidad de terapia intensiva y pueden tener lesiones secuelares en imágenes. Thapar, A. y Cooper, M. (2016), “Attention deficit hyperactivity disorder”, Lancet, 387(10024): 1240-1250. ), Handb. 0000022426 00000 n
Jensen, P.; Hinshaw, S.; Kraemer, H. y cols. Se le puede dar una devolución al niño, dependiendo de su edad y de su entendimiento. Clasificación de los trastornos de ansiedad según criterios del DSM-5 Los subtipos establecidos por el DSM-5 (APA, 2014) se enumeran en el cuadro 19.4. Conflictos familiares y sociolaborales. El primer ultrasonido debe hacerse a las 7 semanas. Fundamentos para el tratamiento de las alteraciones del lenguaje, Verónica Maggio Las subespecialidades dentro de la fonoaudiología Trastornos del habla Intervención en disglosia Intervención en dislalias Intervención en disartria Intervención en disfluencia: programa de estimulación de la fluidez de Susan Meyers Intervención en Trastornos del lenguaje Intervención en trastornos del lenguaje Hipoacusia Equipamiento Intervención en hipoacusias Bibliografía Capítulo 11. Hay una fuerte interacción entre ambos, aun a nivel molecular. Sinapsis químicas La formación de las sinapsis químicas requiere la exacta aposición de los receptores y andamios postsinápticos con la maquinaria que exocita el contenido de las vesículas sinápticas. Jaswal, V. K. y Markman, E. M. (2003), “The relative strengths of indirect and direct word learning”, Developmental Psychology, 39(4): 745-760. Recanzone, G.; Schreiner, C. y Merzenich, M. (1993), “Plasticity in the frequency representation of primary auditory cortex following discrimination training in adult owl monkeys”, J. El modelo de triple código plantea la existencia de tres módulos, cada uno de los cuales se relaciona con la funcionalidad de distintas redes cerebrales. Cuando un niño o adolescente con discapacidad intelectual presenta trastornos de conducta, se debe focalizar en las conductas problemáticas para establecer un programa terapéutico (Tallis y cols., 2006), tratando de aproximarse lo más posible a síndromes clínicos de nomenclatura internacional, como la CIE o el DSM, para trabajar de modo interdisciplinario aunando objetivos. Finalmente, no podemos dejar de mencionar que ciertas drogas (anfetamina, L-dopa, eritropoyetina, factores de crecimiento, etc.) La principal razón para llevar a cabo en forma efectiva y precisa la identificación de esta población de niños es evitar el fracaso escolar, la repitencia asociada a la sobre edad y eventualmente la deserción escolar. Como criterios de exclusión se citan: discapacidad intelectual, autismo, lesión o daño neurológico y sordera. Psychiatr. Cuando se decide medicar deben evitarse las BDZ y el FB, ya que empeoran los trastornos de conducta. Estas dificultades son habitualmente consecuencia de un déficit en el componente fonológico del lenguaje y se presentan de manera inesperada, ya que otras habilidades cognitivas se desarrollan dentro de lo esperado con una adecuada enseñanza de la lectura y la escritura. Conocer las propiedades psicométricas, qué fortalezas y debilidades tienen las pruebas que se van a utilizar, va a permitir rescatar los datos con mayor precisión. En un paciente pueden ser los tics en sí mismos, en otro la comorbilidad, como el ADHD o el TOC, mientras que en un tercero puede ser una combinación de factores. Los trastornos de los núcleos de la base se clasifican en dos grandes categorías, según exista disminución o aumento de los movimientos. 231-244. — (1993), “Arithmetic disabilities, specific and otherwise: a neuropsychological approach”, J. Lo único que hacen es negar la información sobre cómo el niño se maneja en una situación grupal como es la escuela, demoran la implementación de estrategias para ayudarlos, sostienen el fracaso escolar y social (que mella la autoestima de estos niños, que continúan sin saber por qué fallan en esos ambientes, por qué los rechazan sus pares) y el deterioro en su calidad de vida. • Otros exámenes complementarios. Por otra parte, también existen problemas psicopatológicos que reclaman tipos de psicoterapia específicos; en tales casos es más conveniente invertir en el esfuerzo que implique realizarlos que derrochar energía en alternativas que no van a modificar sino levemente el problema (Shirk y Russell, 1996). ), Pediatr. Crollen, V.; Seron X. y Nöel, M.-P. (2011), “Is finger-counting necessary for the development of arithmetic abilities?”, Front. ¿Cuándo pedir una evaluación neuropsicológica? Entrevista inicial: admisión y contrato. Cuadro 17.5 Diagnóstico diferencial entre tics y estereotipias TICS TICS ESTEREOTIPIAS Edad de comienzo 5-7 años < 3 años Patrón de movimiento Variables Fijos Predominio cara y cuello Brazos, manos, cuerpo Rápidos, aleatorizados Rítmicos Breves Continuos y prolongados Excitación, estrés Excitación, estrés Breve Distracción Frecuentemente + +/- + - Localización Ritmo Duración Precipitantes Supresión voluntaria Historia familiar Respuesta al tratamiento farmacológico Fuente: Fejerman (2010). Dev. En la actualidad no existe una cura definitiva para los pacientes con DMD aunque se están investigando nuevos tratamientos. Este defecto suele estar asociado al descenso de las amígdalas cerebelosas –la llamada “malformación de Arnold Chiari II”– y a hidrocefalia. A nivel cerebral, el numeral arábigo, cuya modalidad es visual, es reconocido mediante la decodificación efectuada por un procesamiento cognitivo similar al sistema de la forma visual de la palabra (aunque disociable de este) y ubicado de forma bilateral en el gyrus fusiforme (áreas B37 y 21 de la figura 12.1), región destinada al registro de formas visuales complejas. Por esto insistimos, en nuestra práctica, en utilizar otros canales sensoriales de entrada de la información y no únicamente el canal auditivo lingüístico. Sube y baja escaleras tomándose de una baranda. Gatea. El desarrollo de las destrezas aritméticas y numéricas se encuentra sistemáticamente afectado en dichos complejos clínicos, más allá de la arquitectura neurocognitiva que explique la dificultad o de las nosologías que estén en la base de esta. En niños con epilepsia del lóbulo temporal es necesario realizar evaluación neuropsicológica completa, sobre todo en los que tienen un comienzo de la epilepsia anterior a los 6 años (Lopes y cols., 2010). Debe tenerse mucho cuidado cuando se utilizan pruebas para medir el cociente intelectual ya que no todas tienen la misma exigencia ejecutiva y, a la vez, si un niño tiene una disfunción ejecutiva, tal vez los resultados estén reflejando su rendimiento actual, pero no su verdadero nivel intelectual. En los últimos años varios equipos de investigación se han abocado a esta tarea. Disartrias Son trastornos de la pronunciación debidos a una afectación de las vías centrales, nervios craneales o grupos musculares que intervienen en los patrones motores articulatorios. Parálisis cerebral Uno de los hallazgos anatomopatológicos característicos en los pacientes con PC es la lesión de los axones de la vía corticoespinal, mientras que las neuronas corticales piramidales quedan intactas, aunque pueden hacer proyecciones intracorticales aberrantes (Marín-Padilla, 1997). Síndrome de frágil X Es la causa más frecuente de discapacidad intelectual hereditaria. Cuadro 5.5 Enfermedades infecciosas perinatales y afectación cognitiva Germen CMV Compromiso clínico (en %) Retraso en el crecimiento intrauterino o prematurez: 21%-50% Síndrome neurológico neonatal: 40% Microcefalia: 87% Meningoencefalitis: 75% Epilepsia Hipoacusia bilateral: 60% PC: 45% RMI: Calcificaciones: 80%, polimicrogiria, lisencefalia, ventriculomegalia, hipoplasia cerebelosa, leucomalacia periventricular o porencefalia Corioretinitis Hepatosplenomegalia, anemia Hernia inguinal Neumonitis (Swanson y Schleiss, 2013) Compromiso cognitivo y conductual (en %) DI (de moderada a severa): 45% (Noyola y cols., 2001) Herpes zóster perinatal e infantil Transmisión en el canal de parto Lesiones cutáneas: 84% Coriorretinitis: 84% SNC: Microcefalia: 100%, meningoencefalitis con alta mortalidad, leucomalacia, hidrocefalia, epilepsia, panencefalitis subaguda PC Mortalidad: 20-46% y 80% en formas diseminadas DI: 80% HIV Transmisión en el canal de parto SNC: Meningoencefalitis, atrofia cerebral, calcificaciones, vasculopatía, mielitis, microcefalia adquirida Retraso global del desarrollo Zika SNC:Microcefalia, neuropatía de Guillain-Barré en adultos Secuelas: < 1% Retraso global del desarrollo Toxoplasmosis Frecuencia: ++, especialmente en el último trimestre SNC: Meningoencefalitis, microcefalia, atrofia, malformaciones, calcificaciones, hidrocefalia, epilepsia Corioretinitis, Amaurosis: 69% PC: 76% Sordera: 17% Hepatosplenomegalia, anemia Neumonitis DI: 89% (Remington y cols., 2006) Rubeola Grave en el primer trimestre Compromiso ocular: 50% Compromiso cardíaco: 57% Retraso de crecimiento Microcefalia: 80% PC 50% Sordera: 83% DI 50% Trastorno aprendizaje: déficit visomotor ADHD 50% Autismo: 6% Sífilis SNC: Meningitis, hidrocefalia, lesiones cerebrovasculares, epilepsia, neuropatía sensitivomotora Atrofia óptica y auditiva Hepatoesplenomegalia, anemia Rash cutáneo Periostitis DI Meningitis bacteriana Mortalidad 0.3% Sordera uni- o bilateral 1.4%Hipoacusia 6.7% Ceguera 0.3% PC 0.5% DI 3% T aprendizaje 20% T conducta 8% ADHD 2.4% Abreviaturas: DI: discapacidad intelectual; ADHD: trastorno de atención con hiperactividad e impulsividad; PC: parálisis cerebral; T: trastorno. Se controló la posibilidad de haberse deteriorado por haber interrumpido sus estudios, pero la pérdida de capacidad cognitiva se produjo aun en aquellos que continuaron estudiando, por lo que no se explica por déficit de estimulación cognitiva. De este modo se procede hasta que el niño cuente con un repertorio de entre 35 y 45 palabras reconocibles de modo estable, sin confusiones. (2007), “Attention as an organ system”, Neurobiology of perception and communication: from synapse to society, actas de la IV De Lange Conference, Londres, Cambridge University Press. De un modo más cercano a la corriente neurocognitiva, hoy se prefiere hablar de un grupo de “coconductores” o “líderes de sección” para definirlas. Autorrealización: guía los procesos cognitivos que llevan al autoconocimiento, la autorreflexión y el autoanálisis, accediendo a la información acumulada y aplicándola en situaciones específicas. Psychol. %%EOF
Durkin, K.; Pearl, P.; Conti-Ramsden, G. y Mok, P. (2013), “Severity of specific language impairment predicts delayed development in number skills”, Front. 297-320. Nichols, P. y Chen, T. (1981), Minimal brain dysfunction. Se realizan en forma no estructurada, semiestructurada por listas de preguntas o estructurada con niveles de intensidad de los síntomas. 48-56. En un sentido más amplio, se pueden trabajar las FE ligadas a habilidades sociales, pragmática, resolución de problemas y control emocional. Este es uno de los factores que dificultan el establecimiento de normalidad, presencia de riesgo y/o existencia de patología. Los tóxicos clásicos que se ha documentado que producen déficits en el neurodesarrollo sin otros síntomas clínicos son plomo, mercurio, arsénico, PCB o policlorofenilos, solventes y pesticidas, pero también nuevos contaminantes ya reconocidos, como manganeso, fluoridos, percloratos y esteres de difenilo, descriptos en revisiones de Grandjean y Landrigan (2006 y 2014), que se presentan en el cuadro 5.6. Formulaciones del metilfenidato Los preparados disponibles en Argentina se describen en el cuadro 19.7. En realidad, el grupo estaba constituido por 38.624 niños, pero se usaron criterios de exclusión muy estrictos (por ejemplo, quedaron fuera los niños con parálisis cerebral, con retardo mental o con enfermedades neurológicas definidas) para precisar los datos referidos a trastornos del desarrollo (Nichols y Chen, 1981). Clásicamente se concebía al cerebro como estático e invariable. Contraindicaciones Fluvoxamina, propanolol, drogas que inhiben el citocromo P450 2D6 (fluoxetina, paroxetina). Bromley, R.; Mawer, G.; Briggs, M.; Cheyne, C.; Clayton-Smith, J. y Liverpool and Manchester Neurodevelopment Group (2013), “The prevalence of neurodevelopmental disorders in children prenatally exposed to antiepileptic drugs”, J. Neurol. Con I.H. Síndrome semántico-pragmático. Hum. Las mujeres tienen medias más altas que los varones, especialmente a partir de los 7 años; también las regiones urbanas dan medias más altas, especialmente a partir de la instrucción escolar. • Escala BASC-II (Reynolds y Kamphaus, 2004): es una escala de valoración de conductas desadaptativas para niños de 2 años a jóvenes de 21 años, con cuestionarios para padres, para docentes y autoadministrados, adaptados a población española. (2005), “Dyscalculie développementale: l’approche ‘neurocognitive’”, Annales, Fondation Fyseen, París, nº 20, pp. Montero, D. y Fernández-Pinto, I. Bax, M. y McKeith, R. En los niños adoptados, se pudo demostrar que la proporción de ADHD en padres biológicos era mucho más alta que en los padres adoptivos, aun en adopciones internacionales (Askeland y cols., 2015). Elbert, T.; Pantev, C.; Wienbruch, C.; Rockstroh, B. y Taub, E. (1995), “Increased cortical representation of the fingers of the left hand in string players”, Science, 270(5234): 305-307. Se contabilizan alrededor de cuatrocientas terapias diferentes, algunas incompatibles entre sí (Fernández Hermida y cols., 2013; Prochaska y Norcross, 2009). ), Neurociencias y educación, Buenos Aires, Paidós. Manual de evaluación del TSA [4ª ed. Ramos, J. y Cuetos, F. (1999), Evaluación de los procesos de lectura en alumnos del tercer ciclo de educación primaria y educación secundaria obligatoria (PROLEC-SE), Madrid, TEA. Pediatr., 164(6): 1327-1332. en Aizpun y cols., 2013), mientras que las palabras aisladas solo transmiten rasgos semánticos, las oraciones permiten entrever aspectos relativos a los roles temáticos, como quién realiza una acción, sobre quién esta es realizada, cuándo, cómo, dónde. (2007), La memoria del niño. (1999), incluye nueve tareas que pueden valorar los distintos subtipos atencionales y permiten establecer un perfil de fortalezas y déficits para la intervención. En la mayoría de los casos estarían involucrados numerosos factores, agudos y crónicos. 4) Procedimientos informales de evaluación: permiten obtener información adicional para el diagnóstico y el diseño de las intervenciones, por ejemplo, a través de cuadernos escolares, videos o informes de docentes o de trabajadores sociales, que aportan las características socioambientales del entorno en el que niño está inserto o escolarizado. Estas no son necesariamente analógicas a los aspectos funcionales de la mente, es decir, no podemos predecir el sustrato neural a partir de las competencias psicológicas. 6. En la evaluación poscirugía los resultados fueron: de los pacientes con ETI solo 3 aumentaron el coeficiente intelectual (CI), 1 se mantuvo igual y 5 disminuyeron; la memoria verbal a largo plazo continuó siendo deficitaria en 8 pacientes, con una leve mejoría en 3 (8) y un descenso en 3 (8); la fluencia fonológica descendió en 3 (7) y mejoró en 2 (7), la semántica mejoró en 6 (6) pacientes. Algunas de las técnicas sugeridas son las siguientes: 1. Enfermedades de los núcleos de la base Los GB son núcleos de sustancia gris subcorticales. Los niños con alteraciones en el lenguaje suelen tener muchas dificultades en este aspecto, de manera tal que la aplicación de gestos fonológicos resulta beneficiosa para la construcción correcta de palabras. Dentro de la etiología genética, es un trastorno familiar ya que alrededor de la mitad de los padres de niños hiperactivos tuvieron en su infancia ADHD. La plasticidad sináptica es la llave para el desarrollo temprano de circuitos neuronales y los disturbios en esta plasticidad son la base de distintos trastornos del desarrollo. En cuanto a las meningitis bacterianas, pueden quedar además secuelas en audición, tanto por la afectación por los gérmenes como por la neurotoxicidad de algunos antibióticos que se requieren para controlarlas. Síndrome de Inmovilidad. Pero no bastó la teoría genética para explicar el Tourette cuando estudios en gemelos mostraron una asociación entre el peso de nacimiento y la expresión del Tourette, indicando que factores no genéticos (prenatales) influyen en la severidad de los tics (Hyde y cols., 1992). En la forma del adulto la debilidad comienza luego de los 20-30 años. La técnica de restricción del miembro no afectado es utilizada para mejorar la función del miembro superior parético. La comorbilidad entre ADHD y TOD en la infancia es el mejor predictor de trastorno disocial en la adolescencia. (2013) encuentran que la severidad del trastorno del lenguaje predice las dificultades en el dominio del número a los 7 años y que dichas dificultades pueden profundizarse luego de los 8 años. Es importante entender que, en realidad, las FE ejecutivas no abarcan solo los lóbulos frontales, ni toda la actividad frontal puede considerarse FE. (2014), Manual de intervención para trastornos del desarrollo en el espectro autista. i. Con frecuencia olvida las actividades cotidianas (por ejemplo, hacer las tareas, hacer las diligencias; en adolescentes mayores y adultos, devolver las llamadas, pagar las facturas, acudir a las citas). La hipersomnia se presenta de al menos tres formas diferentes según los especialistas, las cuales son las siguientes: En este caso las horas de descanso son las normales o menores, pasando el adulto mayor entre 6 y 10 horas de sueño nocturno. Muchas veces se utiliza la combinación de fármacos para lograr mayor eficacia y respuesta. 7, p. 988. Kandel, E.; Schwartz, J.; Jessell, T.; Siegelbaum, S. y Hudspeth, A. Neurol., 38(4): 267-272. (2013), “Intracortical myelin links with performance variability across the human lifespan: results from T1- and T2-weighted MRI myelin mapping and diffusion tensor imaging”, J. Sci., 9(1): 6-10. Webb, B.; Frempong, T.; Naidich, T.; Gaspar, H.; Jabs, E. y Rucker, J. Objetivos de la evaluación en la práctica clínica La complementariedad evaluación-intervención La consulta neurolingüística Encuadre general Recursos nuevos y tradicionales para la evaluación del lenguaje La hora de juego lingüística Descripción Características principales Objetivos Materiales El rol del examinador Pruebas estandarizadas: los tests de lenguaje Ejemplo de un caso típico de trastorno del desarrollo del lenguaje Diagnósticos diferenciales Importancia de la semiología Retraso simple del lenguaje (hablantes tardíos) versus trastorno del desarrollo del lenguaje Dislalias versus trastornos del desarrollo del lenguaje Trastorno de la comunicación social (pragmático) versus trastornos del espectro autista Tratamiento Los programas de intervención La orientación de los padres, la participación de la familia y de la escuela Pronóstico ¿Cuál es la evolución de un niño con trastorno del lenguaje? (1969), “Dissociated motor development simulating cerebral palsy”, Neuropadiatrie, 1(2): 187-199. fulminante; no recomendado con miastenia gravis; consultar al oftalmólogo si se deteriora la visión; evitar exposición UV/solar; no prescribir quinolonas ni fluoroquinolonas para: tratamiento de infecciones autolimitadas o leves (como faringitis, amigdalitis y bronquitis aguda), profilaxis de la diarrea del viajero o de las infecciones recurrentes de las vías urinarias bajas, infecciones no bacterianas o para infecciones de leves a moderadas (incluidas cistitis no complicadas, exacerbaciones agudas de la bronquitis crónica y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, rinosinusitis bacteriana aguda y otitis media aguda), a menos que otros antibióticos comúnmente recomendados para estas infecciones se consideren inadecuados ni se deben prescribir a pacientes con antecedentes de reacciones adversas graves tras la administración de este tipo de antibióticos; mayor riesgo de sufrir lesiones tendinosas tras la administración de quinolonas y fluoroquinolonas en ancianos, trasplantados o en pacientes en tratamiento con corticoides; interrumpir el tratamiento en caso de que aparezcan síntomas que afectan al sistema musculoesquelético (tendinitis, rotura tendinosa, mialgia, debilidad muscular, artralgia y edema articular) o al sistema nervioso (neuropatía periférica, psicosis, ansiedad, insomnio, depresión, alucinaciones, pensamientos autolíticos, confusión, alteraciones de la audición o la visión, o de los sentidos del gusto y el olfato); aumento del riesgo de aneurisma y disección aórticos (sobre todo en ancianos); valorar riesgo/beneficio en: pacientes con antecedentes familiares de aneurisma, diagnosticados de aneurisma aórtico y/o disección aórtica preexistentes o en presencia de otros factores de riesgo o trastornos que predispongan para aneurisma y disección aórticos (síndrome de Marfan, síndrome vascular de Ehlers- Danlos, arteritis de Takayasu, arteritis de células gigantes, enfermedad de BehÇet , hipertensión, aterosclerosis conocida). IV, controlar función cardiovascular con: hipotensores, anestésicos con barbitúricos. En el capítulo 17 se describen en profundidad los movimientos anormales y las enfermedades de los núcleos de la base. También se pueden producir síntomas sistémicos, como prolapso de la válvula mitral (a nivel cardiovascular), reflujo gastroesofágico y displasia de cadera (cuadro 6.2). | Bi2T, 5 ideas de manualidades para personas mayores. Bernstein, J. y Waber, D. (1996), Developmental scoring system for the Rey-Osterrieth Complex Figure: professional manual, Lutz (Florida), Psychological Assessment Resources. Prockop, L. y Chichkova, R. (2007), “Carbon monoxide intoxication: an updated review”, Journal of the Neurological Sciences, 262(1-2): 122-130. (2010), Trastornos del desarrollo en niños y adolescentes: conducta, motricidad, aprendizaje, lenguaje y comunicación, Buenos Aires, Paidós.
Fabricación De Ladrillos Con Plástico Reciclado,
Porque Se Dice Que Los Sacramentos Son Signos Sensibles,
Crema De Palta Para Salchipapa,
Registro Bibliográfico De Un Libro Impreso,
Carrera De Sobrecargo De Aviación,
Que Significa Soñar Con Jesús Que Te Habla,
Modelamiento De Procesos Tesis,
Elementos Del Contrato Internacional,